Este nuevo estilo de vida tiene como objetivo principal reducir los desperdicios de todo un año, en un tarro pequeño de vidrio para reducir el impacto negativo del ser humano en el planeta y ayudar a que sea más saludable y sostenible.
Nuestro hogar es el primer lugar donde debemos empezar segmentando los residuos y colocarlos en contenedores recicladores. Debemos reducir el uso del plástico y para eso, podemos cambiar las bolsas de plástico por las de tela para reutilizarlas y rechazar lo que no necesitas.
- Rechazar lo que no necesitamos: Para lo cual debemos pensar bien que es lo realmente imprescindible y lo que podemos dejar de aceptar como los volantes, sorbetes o bolsas de plástico.
- Reducir lo más posible: Debemos organizarnos para utilizar lo menos posible los empaques, envases descartables o bolsas de plásticos. Se pueden comprar productos a granel o comprar menos productos embotellados como el agua.
- Reutilizar productos: Una buena alternativa para dejar de usar productos desechables sería la de aprovechar las bolsas de tela o recipientes de vidrio que se pueden lavar y usar nuevamente.
- Reciclar todo lo que se pueda: Hay cosas que no podemos dejar de usar o recibir como el papel, plástico o vidrio. Una buena alternativa para sacarles provecho, es reciclándolos.
- Reincorporar los residuos: Una forma de reciclar los restos orgánicos es la de compostarlos también pueden servir de alimento para los animales o hacer limpiadores caseros para el hogar.